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lunes, 1 de febrero de 2016

EUSKERA


EL EUSKERA ERA EL IDIOMA ORIGINAL DEL CONTINENTE

    Por Elisabeth Hamel y Theo Vennemann

Artículo original en alemán: http://www.spektrum.de/
Traducido por Natalia Quintero para Mediaberri


Una gran cantidad de nombres de ríos y lugares europeos están relacionados con el Euskera. Los nombres fueron dados tras la ultima era glacial y aun hoy en toda Europa la gente esta unida a los vascos, raza pre-indoeuropea. En las siguientes intervenciones, lingüistas y genetistas dan cuenta de los hallazgos sobre esta teoría.

Ebesberg yace pintorescamente al pie de las colinas de los Alpes, cerca de un pequeño río, el Ebrach. Todavía hoy, tras la pequeña capital de la alta Bavaria,  se extiende una vasta región boscosa. El hecho de que el lugar tomara su nombre de la riqueza salvaje parece plausible. Por eso lidera un verraco su escudo de armas.

Pero el sentido actual del nombre del lugar es engañoso. La designación no viene originalmente de la Edad Media, y tampoco de los celtas, pero si probablemente de los vascones, la gente que se estableció en la región justo después de la ultima era glacial desde el sur de Francia.

Muchos nombres de los asentamientos, ríos, montañas, valles y paisajes en Europa podrían proceder de idiomas pre-indoeuropeos. Además, tras nuevos estudios han sido encontradas conexiones particulares con el Euskera. Este hecho se basa en que la raza relacionada directamente con los actuales vascos habito en su día casi toda Europa. Estos eran los vascones, denominación latina para los vascos de la antigüedad.

Ahora, estudios genéticos completamente independientes han probado lo mismo que los estudios lingüísticos. (Ver intervención “articulo” Pág. 41) De ningún modo los vascos son, en si mismos, un grupo biológicamente al margen del resto de los europeos, todo lo contrario, su genotipo se ha encontrado en un grado asombroso en toda la población europea. ¡Siendo muy exagerados, se podría decir que todos los europeos somos vascos!

Estos descubrimientos contradicen previos puntos de vista sobre los asentamientos europeos de los últimos diez o quince mil años – desde la ultima era glacial (cuyo ultimo clímax fue hace veinte mil años). Hubo muchas versiones sobre el origen de los actuales europeos y sus idiomas.

Además, los vascos siempre tomaron en esto una posición especial. Su idioma no es indoeuropeo, y había variadas teorías sobre su origen, y también sobre su posible migración, tanto terrestre como marítima. Los científicos no vieron relación alguna con el resto de europeos. Por lo tanto estos debían descender de alguna rama previa solamente.En los últimos diez mil años los grupos inmigrantes de Asia central y Oriente próximo trajeron la agricultura y los idiomas indoeuropeos. Se cree que estos indoeuropeos se estabilizaron y al hacerse mayor su población acabaron absorbiendo influencias ya existentes.

Ya en el siglo XIX los varios lingüistas reconocieron que los nombres de un gran numero de ríos, arroyos, y lagos debían ser muy antiguos. Además ya habían caído en que la población original llamaba a los accidentes geográficos, como norma, simplemente de manera topográfica, como “montaña”, “agua” y que estos nombres originalmente no significaban mas que eso, aunque posteriores generaciones de pobladores adquirieron esas denominaciones sin entender realmente su significado. Sin embargo, en casos individuales es difícilmente reconocible para los europeos que antiguo cambio lingüístico viene desde el núcleo.

Por otra parte, los nombres de los asentamientos están considerados como posteriores. En la opinión de varios investigadores, muchos aparecieron solo en tiempos históricos concretos, y frecuentemente situaron estas fuentes solamente en la Edad Media.

Cuando la regla parece aplicarse tan solo a lugares y accidentes geográficos, mas se puede encontrar en otras denominaciones. En toda Europa, muchos nombres contienen una raíz similar a simple vista. Así que podemos encontrar “al” como en alpino, “Elz” como se llamaba a la antigua Alantia. Otro grupo son los “var”, como en warns o in werre. Numerosos “sal” como el salmón de cuya raíz se obtuvo también la variación hall. Tras nuevos estudios, hay también un gran grupo para “is”, como en ice, Isar y Eisak y “ur” y “aur” para nombres como Urach y Aurach.

Además, la misma regla se aplica a varios nombres de lugares. El libro de códigos postales alemanes registra siete municipios con el nombre Ebersberg. Nueve lugares con Ebersdorf, y dieciséis con Eberbasch. Todos juntos suman un total de alrededor de ochenta lugares registrados con la raíz de “verraco”, desde Eberau hasta Ebertsheim con dicho elemento.

Fósiles lingüísticos vivientes.

También en Francia, lugares con la raíz latente yacen por docenas. Por causas de acento estas palabras nos suenan diferentes. Pero Ebréon, Iba’s roll, Evrune, Ivry, Ivors, Averdon, Avricourt, Avrolle, Yvré, y algunos otros se componen, hasta donde han sido examinados, de la misma raíz lingüística. Pero ningún francófono relacionaría estas palabras con el macho verraco, porque en francés su nombre es sanglier.

El hecho de que los nombres de los asentamientos hayan demostrado un asombroso patrón común al norte de los Alpes a través de Europa hasta Gran Bretaña y el sur de Escandinavia, era ya algo comprobado en la mitad del pasado siglo, de mano de toda la “Tübinger Indogermanisten Hans Krahe (1895 – 1965), sosteniendo estos nombres como “fósiles... de un antiguo idioma y a menudo perdido” y continuando la investigación de sus raíces en los antiguos idiomas indoeuropeos.

Por otra parte estas variaciones no eran a menudo, satisfactorias. Además, el indogermánico – o posterior a la nomenclatura internacional de indoeuropeo – eran relativamente tardías. Tras la exposición de la teoría del arqueólogo británico Colin Renfrew, estas variaciones resultaron idénticas al primer agricultor europeo, en la era Neolítica.

Si uno supone que los nombres geográficos previos, desaparecieron con poblaciones venideras, se debería tener en cuenta también a los primeros asentamientos que emergieron inmediatamente tras la ultima era glacial. Los primeros agricultores empezaron a penetrar Europa central hace solamente alrededor de 7000 años. Extensas áreas que habían sido inhóspitas durante la era glacial volvieron a ser habitadas. Así que el asentamiento duradero mas antiguo conocido por los arqueólogos es posterior al climax de la ultima formación glacial, hace mas de 18.000 años en Freiburg, la llamada Toscana alemana. Estos pobladores, los antiguos europeos, nombraron los alrededores y los ríos de su entorno, por lo tanto, debemos volver hasta esa época para investigar su origen. Todavía hoy se puede observar como grupos de inmigrantes adquirieron las denominaciones geográficas de pobladores previos en las mas variadas regiones del planeta y las modificaron en función de su propio lenguaje incluso sin entender su significado original.

En teoría, no es comprensible que el indoeuropeo acoja las antiguas denominaciones de manera que ríos y arroyos Españoles tengan en su nombre los mismos elementos lingüísticos que los róos al norte de los Alpes.  Especialmente si se tiene en cuenta que el indoeuropeo solo se extendió al suroeste de Europa en el ultimo milenio antes de Cristo. Algunos de estos ríos ibéricos, por lo tanto, deben su nombre a palabras derivadas del euskera. En el vocabulario vasco se encuentran varias raíces características como “is”, “ur” e “ibar”, que se encuentran en varias denominaciones de ríos europeos. Ello conlleva un significado preciso en su nombre, en conexión directa con agua o elementos fluviales.

Las vocales también destacan en ciertos casos indicando una relación con el euskera. Al menos la mitad de los antiguos nombres de los ríos comienzan con una vocal. Frecuentemente (parcialmente solo en una forma previa del nombre) es la vocal “a”, y si no, esta vocal se encuentra dentro del nombre. La “i” y la “u” también se encuentran en numerosas denominaciones, aunque todas estas vocales son atípicas para el antiguo indoeuropeo.  De hecho, encontrar vocales ya era de por si, extraño, y cuando se encontraban eran la “e” y la “o”, pero por el contrario, un tercio de las palabras en euskera empiezan con la “a”, y una gran cantidad del resto la contienen. Palabras que empiecen con “i” y “u” son también muy comunes.

Durante los últimos años este origen ha sido examinado en la Cátedra de Munich de Teorías Lingüísticas Alemanas de la misma manera que se examino por el nombre del asentamiento, y de ese modo también encontraron que las conexiones con palabras y elementos del euskera se producían frecuentemente. Hasta donde se ha comprobado, tropezamos de nuevo, especialmente, con  palabras en euskera para accidentes geográficos y también en palabras topográficas.

A menudo, pero no siempre, en el nombre de los ríos y del paisaje, hay estructuras con una antigua palabra, la cual describe o da forma al paisaje. Si volvemos al ejemplo  de los nombres con la raíz del  verraco, uno de los lugares en Francia con alguna de estas raíces, Iba’s roll, yace en el valle de los Pirineos, porque la palabra vasca “ibar” significa valle, estuario.

Milenios más tarde la población cambió a otros idiomas esos nombres, de manera que recibían el mismo significado de modo comprensible, y finalmente de la palabra en euskera “ibar”, o mas exactamente, de esa palabra vasca, se convirtió al alemán, tanto para ríos como para nombres de asentamientos.

Otros tantos nombres de lugares podrían ser analizados de la misma manera, relacionadas con el agua. Hay, por ejemplo, varias denominaciones que contienen evidentemente el componente vasco “is”. En euskera esta silaba se encuentra en palabras altamente relacionadas con el agua. En Bavaria, hay lugares que se llaman Ismaning (antiguamente Isamaninga), Isen (en Isen, antiguamente Isana) y Eioslzrid (antiguamente Isoltesried), en Suiza también encontramos los lugares Isen e Isel.


Además de eso, hemos encontrado también nombres que no se referían a elementos de la naturaleza o del agua. La palabra vasca “aran” significa valle,  y nombres con este elemento se reparten por toda Europa. En el sur de Inglaterra la ciudad de Arundel, en Noruega y también en Suecia un lugar llamado Arendal. En Alemania hay una docena de lugares como Arnach, Arnsberg, Arnstern, Aresburg y Ahrensburg. también Ohrenbach que antiguamente se llamaba Aranbach, además del alto del peñón del negro Palatino, antiguamente llamado Marnstein (o en el Arnstein).


Fuente http://www.ehu.eus/mediaberri/00tik10arte/05%20Astea/Euskera%20era%20la%20lengua%20original%20del%20continente.htm

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